Que 2016 no sea un año más
Llevo unos días pensando en escribir un post introductorio del año, con
la correspondiente valoración de 2015 y, cómo no, la típica lista de buenos propósitos para el nuevo año. Pero como veis no estáis leyendo nada de eso. Ya que la valoración del 2015, en su conjunto, no es positiva, he decidido dar a eliminar y simplemente limitarme a desearos que el 2016 no sea un años m
ás. Y es que no hay que centrarse en los aspectos negativos de nuestra vida, solo que nos sirvan de aprendizaje para ver lo que no queremos y lo en lo que no debemos volver a caer.
Que el 2016 no sea un año más significa que no nos limitemos a ver pasar los días en el calendario y hacer que cada día cuente. Que cada día encuentres una cosa, por pequeña que sea que te haga sonreír, que cada día encuentres una cosa por la que merezca la pena luchar, que ninguno de los 366 sea un día perdido por pensamientos negativos que a nada nos conducen salva a un círculo vicioso de negatividad.
No dudes en alejar de tu vida a personas tóxicas, personas que mal te quieren y cuya influencia perturba tu felicidad, aleja la envidia de tu vida, aléjate de quien no se alegre de tus triunfos. No dudes en deshacerte del equipaje que solo supone un peso a tus espaldas. Persigue tus sueños, o temas tomar decisiones que te acerquen a lo que quieres.
Valora lo bueno que tienes a tu alrededor, valora los detalles de las personas que te quieren, valora las pequeñas cosas, valora ese abrazo que te dieron en un momento de bajón, valora esa sonrisa cómplice que te dice «estoy contigo», valora a quien te haga reír
Y sobre todo sé honesto contigo mismo, reflexiona sobre tu vida, sobre lo que quieres y sobre lo que no. Nadie dice que sea fácil pero merecerá la pena.
¡Feliz 2016!
2013, adiós y gracias por todo
Última noche de insomnio del 2013, así que estoy dándole vueltas a la cabeza y he empezado a pensar si el 2013 había sido un año bueno o un año malo. Bueno, si uno duda al menos podemos decir que no ha sido un mal año del todo. Estos 365 días han traído consigo quebraderos de cabeza, en lugar de traer un trabajo «de lo mío»; han traído desilusiones, de las que para ser justos no recuerdo bien cuáles (síntoma de que quedan atrás); digamos que el 2013 no me ha traído todo lo que quería pero sí muchísimo más de lo que esperaba.
Así que llegado el día 31 de diciembre tengo que decir que en mi mochila, la que llevaré conmigo al pasar al 2014, sólo caben las cosas que me han hecho crecer, sólo caben las personas que han estado en todo momento a mi lado, sólo caben las lecciones aprendidas de las malas decisiones, sólo cabe aquello que me dibujado una sonrisa en la cara… estas cosas las arrastraré encantada en esa mochila, no me pesarán, lo que no pienso llevar son las cosas negativas, esas mejor dejarlas atrás, esas no pesan demasiado y no tienen cabida en la mochila que llevamos a cuestas.
Por lo tanto yo he decidido despedir el 2013 dándole las gracias por las cosas buenas que nos ha deparado. Gracias por todas las lecciones aprendidas, este año ha sido un buen profesor; gracias por los amigos que tengo, esos que se preocupan cuando te ven triste y se alegran cuando estás feliz; gracias a la familia por estar ahí; gracias por los momentos buenos en los trabajos que ha traído; gracias por las ganas de hacer cosas y de luchar por lo que quiero; y por último gracias a ti por aparecer, apoyarme en todo y estar siempre.
Y a ti, 2014, te pido que en lo positivo seas igual (o mejor, por pedir) y que traigas esas pequeñas cosillas (por decirlo de alguna forma) que al 2013 se le han quedado pendientes.
Espero que esta noche tod@s despidáis el año como merece y ¡¡¡ Feliz año nuevo para todos y todas!!!
Por cierto el 2014 es el año del caballo en el horóscopo chino, por lo tanto os dejo esta herradura (siempre con las puntas hacia arriba para recoger las cosas buenas) para que empecéis con toda la suerte del mundo el año.
